Proyecto H Contemporáneo

Madrid | México
ARTESANTANDER / Proyecto H Contemporáneo

Broken Things (e), 2017
Fotografía rasgada y suturada con hilo de oro sobre papel. 34 x 38 x 3 cm.

Directores

Miguel de las Heras (Madrid)
Sofía Sáenz de Santa María (CDMX)

Contacto

C/ Velázquez, 80
28001 Madrid, España
Tel: +34 91 599 64 09

Guadalajara, 88. Roma Norte
06700 CDMX, México
Tel: +52 (55) 7589 9591

Info@proyectoh.com
www.proyectoh.com

Artistas representados

José Manuel Ballester (CDMX)
Rafael Barrios
Mel Bochner (en colaboración)
Pablo Genovés (CDMX)
Máximo González
Rocío Gordillo (CDMX)
Livia Marín

Xavier Mascaró
Javier Peláez (CDMX)
Jimena Rincón (CDMX)
Juan de Sande
Abdul Vas
Álvaro Verduzco (CDMX)

Livia Marín

Livia Marín (Santiago de Chile, 1973) es una artista chilena que trabaja y vive en Reino Unido, con una obra que se caracteriza por instalaciones de gran formato en las que incorpora tanto piezas e imágenes elaboradas por ella misma como objetos encontrados y modificados. Emplea técnicas y estrategias características de la escultura, la instalación y el arte procesual. Su obra, con una gran fuerza evocadora, remite a una multiplicidad de referencias familiares, simbólicas, sociales y políticas, planteando preguntas sobre las relaciones entre identidad y consumo, producción en masa, estandarización y globalización, y en relación con la situación política y social de su Chile natal de las últimas décadas.

“Ánforas y Cosas Rotas”, el proyecto que presentamos para Arte Santander, es una instalación de cerámicas y fotografías a partir de objetos cerámicos que la artista fue recolectando en mercados de segunda mano, ánforas antiguas que pertenecen a colecciones de Museos en Europa, y piezas elaboradas ex novo. La fotografía aparece rasgada y suturada con un hilo de oro que va reconstituyendo la forma fragmentada del objeto fotografiado, haciendo referencia a la antigua técnica japonesa de restauración kintsugi.

La obra de Livia Marín se sustenta en su coherencia visual y conceptual, en una resolución de altísima calidad tanto técnica como escenográfica, además de una enorme fuerza poética que engancha fácilmente la sensibilidad del espectador. Sus instalaciones envuelven al paseante y con su fuerza comunicadora generan una relación espontánea de empatía recíproca.